La reunión se realizó en el marco de la gira que Lula lleva adelante por los países más australes del continente americano para participar, primero, en Argentina de la reunión de Jefes de Estado de la CELAC, y luego en su visita oficial a Uruguay donde fue recibido por el presidente Luis Lacalle Pou y la Intendenta de Montevideo Carolina Cose.
Pero si bien el primer mandatario brasilero llegó a Uruguay en visita oficial lo cierto es que la actividad más importante de la que participó fue el encuentro en la Chacra donde Pepe vive con su compañera de la vida, la ex vicepresidenta uruguaya, Lucía Topolamsky.
Ese encuentro era una deuda pendiente entre dos amigos que según contó luego Pepe Mujica se conocen desde hace tiempo y ambos se han acompañado en las buenos y los malos momentos.
Ya desde las 15 horas las inmediaciones de la casa de Mujica estaban rodeadas de algunos periodistas mientras que en el interior de la chacra iban y venían los compañeros que se ocupan de la seguridad de Pepe y la seguridad oficial del Presidente brasilero.
El encuentro duro algo más de una hora. Cuando Lula llegó en auto, por atrás de la entrada principal, lo esperaban Lucía y Pepe. Cuando Lula bajó ambos se fundieron en un gran abrazo fraterno.
Lo que quedó sellado sin dudas en este encuentro, es una amistad que viene de hace tiempo pero que de alguna manera se consolida para trabajar cada vez con más fuerza en la tan mentada integración Latinoamericana.
De eso hablaron a lo largo de una hora y media, además del recuerdo de anécdotas que compartieron los dos líderes más importantes, y que desde el punto de vista político hoy tienen mayor gravitación en la región.
Además de Lucía Topolansky; estuvieron el Intendente de Canelones, Yamandu Orsi; el Secretario General de PIT-CNT (la central obrera uruguaya) Washington Abdala; y el preside te del Frente Amplio uruguayo, Fernando Pereyra.
Por último, vale destacar que Lula Da Silva y Pepe Mujica se dieron el gusto de poder compartir juntos una vuelta por Montevideo en el fusca celeste que desde hace muchos años es el auto que conserva uno de los referentes políticos más importantes de este siglo XXI. (JC)