Por Ximena B. Xiong
En la edición anterior dimos a conocer sobre un hecho delictivo en la ciudad de Chascomús, ocurrido el miércoles de la corriente semana en un comercio ubicado en Avenida Presidente Alfonsín al 1600 casi Ruta 2.
Se trató del comercio Herrería Otega, en la que masculinos ingresaron previo a agujerear el techo de chapa y sustrajeron una suma importante de dinero en efectivo de una caja que se encontraba en el lugar y que también fue violentada.
Pero eso no fue todo, los comercios de los laterales sufrieron daños y robo, como el caso de GyG Aberturas, donde los autores del hecho hicieron el mismo modus operandi, ingresaron luego de romper parte del techo, apagaron las cámaras de grabación y se llevaron dinero en menor y mayor cantidad.
Respecto a lo acontecido, el medio de comunicación Grupo Tiempo entrevistó al encargado del comercio Hierros Otega, Javier Rivas, quien constató el robo al acudir hasta el lugar en la madrugada del miércoles.
“Habían ingresado a la noche mediante un agujero que hicieron en el techo de chapa del galpón y el de madera que da hacia la oficina. Lamentablemente se llevaron una suma importante de dinero y el DVR de la central de la cámara de seguridad”, señaló Rivas.
Al no poseer los registros, mencionó que “la policía iba a buscar las grabaciones de las cámaras de seguridad públicas para ver cuál fue el movimiento en ese horario, porque aparentemente el robo pudo ser entre las 1:40 a 2:20 de la mañana del miércoles al haberse activado un sensor de alarma y que fue destruida”.
Al activarse la alarma, desde la empresa que presta el servicio dio aviso al propietario del comercio, pero no se le dio importancia debido a que “suele suceder que cuando hay tormentas fuertes a veces se activa la alarma, pero aparentemente esta vez no fue por la tormenta”, expresó Rivas.
Y agregó: “Creemos que subieron desde el primer galpón en la que hay un taller mecánico que tiene un techo más bajo, la ferretería, la casa de abertura y luego a nuestro local”.
Ante el modus operandi, se podría ir hacia la hipótesis de que los autores del hecho conocerían la instalación al haber ingresado directamente por los techos, además de que “el agujero está hecho en dirección a la oficina que también fue violentada”, indicó el encargado del comercio.
“Ingresaron y egresaron por el mismo -prosiguió- porque si salían por la puerta a la oficina le tomaba el sensor que está en el galpón y el cual nunca se activó porque nunca se movilizaron por ese lugar”.
Asimismo, el vecino resaltó que “para romper la chapa a precisa sí o sí, por lo menos, una tijera de cortar chapa”, porque el comercio no fue el único perjudicado, también lo fueron los locales que se encuentran en los laterales.
“Le rompieron el techo al comercio que está al lado, que es de abertura y también a la ferretería. A la casa de abertura ingresaron, pero a la ferretería no pudieron porque tenía otro techo que no pudieron romper”.
Tras el lamentable hecho delictivo, Rivas sostuvo: “La reflexión que nos queda es que si tenés alarma y cámaras, no te asegura que no te vayan a robar”.
Por otro lado, la propietaria de GyG Aberturas, Graciela Velis, que también se vio perjudicada detalló: “Ingresaron a nuestro local. Hicieron tres agujeros en el techo de chapa, nosotros tenemos un tinglado, y aparentemente lo han cortado con una tijera de chapa”, coincidiendo con su vecino que sufrió el robo de una suma importante de dinero.
“Entraron a las oficinas, nos revolvieron todo y nos llevaron algo de plata porque previamente habíamos retirado lo recaudado. Fue más el daño que hicieron”, expresó la propietaria y añadió que al haber transcurrido el robo cuando estaba la tormenta de la madrugada del miércoles y haberse agujereado los techos en ambos comercios, se filtró el agua.
“Prácticamente se inundó el local”, dijo Velis, tras haberse radicado la correspondiente denuncia en la Estación de Policía Comunal de Chascomús y habiéndose presentado personal de Policía Científica.
En cuanto a la entrada al local, la propietaria se mostró asombrada de cómo los delincuentes habrían ingresado por el techo haciendo tres agujeros. “Se cayeron, arrancaron el techo y después rompieron el de otra oficina. Acá cortaron la luz para que la cámara no grabara”.
“Tenemos 8 metros y no sabemos cómo se han tirado, pero evidentemente han buscado dónde ingresar porque hicieron tres agujeros para ver dónde caer. No podemos entender cómo salieron porque desde el paredón al techo hay una distancia de más de 2 metros”, destacó Velis.
Finalmente, la propietaria de GyG Aberturas señaló “lamentablemente el delito en Chascomús creció bastante y estamos en la buena de Dios”.