El ataque ocurrió cerca de las 3 de la madrugada en la zona de la laguna, donde la víctima, Nicolás Riccardi, se encontraba junto a sus amigos. En ese momento, indicó una fuente cercana a la causa a Télam, aparecieron los delincuentes y los amenazaron con un fierro para robarles los celulares y la mochila a la víctima.
De acuerdo a la reconstrucción, Nicolás intentó huir, pero a las pocas cuadras lo acorralaron y uno de los ladrones le pegó primero con la barra de hierro en la cabeza y después se la clavó en el corazón.
Unos minutos más tarde un playero del estacionamiento ubicado en la calle Sáenz Peña al 100 encontró el cuerpo del adolescente. Estaba boca abajo y tenía lesiones a simple vista en la cara.
Con el correr de las horas la autopsia estableció que a Nicolás lo mataron con una barra de hierro con punta que le clavaron en el hemitórax izquierdo, lo que le provocó una herida de gravedad en los pulmones y en el corazón.
La investigación
Según los primeros datos surgidos en la causa, no existían problemas previos entre Nicolás y sus amigos y el grupo de delincuentes que los atacó. La investigación quedó a cargo de la fiscal del Fuero de la Responsabilidad Juvenil 2 de Dolores, Mónica Ferre, quien caratuló la causa como “homicidio agravado criminis causa”.
Luego de varias horas de investigación, la Policía detuvo a los tres sospechosos del crimen: un joven de 20 años y dos menores de 17 y 15.