Por Ximena B. Xiong
Estos últimos días, en la ciudad de Chascomús trascendió una publicación que narró un hecho con un desenlace lamentable, al haber fallecido un vecino de 59 años por “un sistema de emergencias ineficaz” y “ambulancias desprovistas de insumos”. Se trata de Ángel Galeano a quien le realizaron maniobras de reanimación durante varios minutos de la mano de su sobrina, médica terapista, clínica y nefrológica, Erica González.
Actualmente sostén de la familia de Galeano, porque “todos tenemos una manera diferente de procesar el dolor. No quiero que nadie tenga que pasar por esto”, señaló la doctora Erica González en diálogo con EL CRONISTA.
Por lo sucedido, se radicará una denuncia contra la Municipalidad de Chascomús, directivos del Hospital Municipal “San Vicente de Paul”, Jefe de Guardia y responsables del funcionamiento del nosocomio. De igual manera, se pautó una marcha para este viernes.
En su relato, donde la impotencia y el dolor se cruzan en las palabras, la médica terapista contó que el miércoles, 7 de julio del 2021, su tía le marcó por teléfono llorando y desesperada por cómo se encontraba su tío. Ni bien cortó la llamada, emprendió rumbo al domicilio que se encuentra a cinco minutos de la Guardia.
“Hice señas de luces, tocando bocina para advertir a los transeúntes que iba a alta velocidad. A mitad de camino, llamé a la ambulancia. Me atiende un contestador automático con diferentes opciones”, hasta que una persona atendió el teléfono. “Cuando hay una emergencia, cada segundo vale oro para salvar al paciente”, resaltó la profesional de la salud tras toparse con una contestadora en un momento crucial.
Y subrayó que durante la llamada fue clara en lo que se requería, “los puse en alarma para que vinieran preparados. Fui especifica con lo que necesitaba que trajeran”, inclusive les informó que el paciente tenía comorbilidades, diabetes y obesidad, por lo cual los profesionales debían prepararse para un cuadro grave.
Una vez en el domicilio, dio con su tío. Le buscó el pulso y comenzó a realizar RCP básico. Asimismo, les pidió a las hijas, mayores de edad, que midieran la glucemia. “Era evidente que estaba infartando mientras estaba esperando la ambulancia”, mencionó González con experiencia y trayectoria.
Nuevamente llamó a emergencia mientras hacia compresiones, “me atienden desde la guardia y les comuniqué que estaba con un paciente en paro, reanimación básica, que necesitaba la ambulancia y elementos para intubarlo. Les dije las cosas que necesitaba”.
Luego de unos cinco minutos del segundo llamado, acudió la ambulancia con un médico joven, una enfermera y el ambulanciero. “Respetuosamente le dije al médico que no se ofendiera, que tenía años de experiencia en terapia intensiva y necesitaba que me colabore. Le pedí a la enfermera para que me pase una vía y suero”.
En ese momento, “se pasó a la fase avanzada de resucitación”, expresó González y continuó: “Cuando solicité las ampollas, solo contaba con cuatro de adrenalina para una persona que pesaba aproximadamente 120 kilos. Irrisorias las dosis”.
“Lo intubo y pedí algo para sujetar la vía aérea. Mientras tanto una de las hijas sostenía el suero para que pasara la medicación. Cuando lo intubé y verificaba si estaba el tubo en vía aérea, pero no tenían oxigeno”, relató la medica terapista.
Tras las maniobras, se dirigieron hacia el servicio de Guardia del nosocomio. Durante el viaje “llamé al terapista de guardia y le avisé todo lo que había hecho, que estábamos llegando y se prepare para usar el desfibrilador, ultima opción que nos quedaba”.
Finalmente, cuando ingresaron a Guardia “no me dejaron acercarme, habiéndolo tratado”. Ante la pregunta de un personal de salud sobre la profesión de Gonzáles y siendo la respuesta médica terapista, la dejaron ingresar.
Al utilizar el desfibrilador, personal que estuvo presente mencionaron “no anda”, cuestión que la médica procedió a explicarles cómo se utilizaba. “Ahí lo paleteamos a mi tío tres veces, pero estaba muerto. Cuando miro el reloj eran las 22.30hs y había empezado entre las 21.50hs. Llevaba 40 minutos de reanimación”, expuso González.
El primer momento de reanimación básica transcurrió desde su arribo al domicilio y la segunda en el servicio de guardia. “Tenía la chance de salvarlo, pero no tuve medicamentos, ni oxígeno, ni los elementos necesarios. No había manera de revertir el cuadro”, lamentó la doctora al no contar con los recursos primordiales.
Por la situación ocurrida, se le consultó a la médica terapista si desde el municipio de Chascomús se pusieron en contacto con familiares de su tío e inclusive con ella, pero la respuesta fue: “Nadie se comunicó. De hecho, le envié audios a Vicens diciéndole que por favor eso no volviera a repetirse. Ningún hijo tiene que pasar por ese cuadro. Yo trabajo en esto, estoy acostumbrada, sin embargo, me marcó. No puedo olvidar la impotencia de que he salvado centenares de vida, porque hace 13 años estoy con la profesión, y a mi tío no”.
También llamó a la Secretaria de Salud, pero no hubo respuestas. “Me crucé con el intendente en una plaza y le dije que era la médica a la que se le murió el tío en las manos, me dijo ‘ah, vos sos la que me estas insultando en las redes sociales’. En ningún momento les falté el respeto a nadie”, declaró la Dra. Gonzáles.
A la vez que añadió que no está en contra del personal que se desempeña en el nosocomio, sino que “es necesario tener los recursos y entrenar al personal para que sepan cómo actuar ante una situación de emergencia y gravedad, sobre todo porque somos un hospital de ruta”.
-Viernes con movilización en reclamo de la salud como un derecho
Tal como anunciamos en la edición anterior de este medio gráfico, la médica terapista confirmó que este viernes habrá una movilización tras lo acontecido. Será a las 11hs con salida desde el hospital municipal.
De allí tomarán Av. Lastra hacia calle Libres del Sur hasta Mazzini para volver por calle Belgrano e ir hasta las afueras del Palacio Municipal, donde “vamos a esperar respuestas”, debido a que con la virilización del posteo de González, vecinos contaron sus experiencias a la médica.
Y de alguna u otra manera, “mi voz representa a todas esas voces que no fueron escuchadas”, indicó González, quien a su vez solicitará audiencia al jefe comunal. “Quiero que esto sirva de ejemplo para que todos tomemos conciencia y luchemos por la salud de nuestra ciudad, que nos aseguren buena atención con los recursos”.
“Nadie está exento. Seamos solidario y espero que el viernes estemos todos en la marcha y fijemos la salud como un derecho, no como un privilegio, que el sistema de salud sea junto, responsable, serio”, culminó Erica González a EL CRONISTA.