Los vecinos afirman que en un solo día se pueden producir hasta siete focos de fuego, y que los bomberos ya han tenido que extinguir más de 90 incendios en la zona. Ante esta situación, “los lugareños reclaman la falta de mantenimiento de las formaciones y el desinterés del municipio”.
Marcos Basatta es uno de los propietarios de los campos linderos a las vías que aparece en el informe de Canal13. El vecino, afectado por la problemática, explica cómo se incendian sus tierras debido a la falta de mantenimiento de las formaciones ferroviarias.
“Pasa la locomotora y prende fuego”, resumió Basatta durante el reportaje sobre las vías, asegurando que en el día pueden llegar a ocasionarse 6 o 7 focos de incendios. Otro vecino explicó que el motor de la máquina genera hollín que luego sale por el caño de escape de la locomotora generando fuego.
Para tener una idea de la magnitud de la problemática, Marcos Basatta señaló que durante el último siniestro se quemaron en un tramo del campo alrededor de 30 palos del alambrado, explicando que cada uno de ellos tiene un valor de entre 30 y 50 mil pesos, sin contar el alambre.
Otro de los problemas que se genera en los campos afectados es el agua, ya que los bomberos deben cargar el vital elemento para apagar los incendios y cada autobomba carga alrededor de 4000 litros. Y lo deben hacer, una vez agotada la carga, de los molinos.
Ante esta situación de falta de mantenimiento y negligencia de trenes argentinos, se suma la sequía y el calor acrecentando una problemática de la que nadie se hace cargo.
Los vecinos afectados han enviado cartas y denuncias a las autoridades de trenes argentinos pero no han obtenidos ningún tipo de respuestas.
Por su parte, el jefe de bomberos local, José Luis Vanzato, señaló que el descontento ante estos repetidos acontecimientos es creciente porque se podrían evitar. También mencionó que se pusieron en contacto con las autoridades de trenes argentinos, quienes reconocieron que los incendios en los campos eran provocados por las maquinas. De hecho, los vecinos, tienen identificadas las locomotoras que ocasionan los focos ígneos.
Javier López, por su parte, puestero de uno de los campos aledaños a las vías, explicó que durante el día pasan alrededor de 4 o 5 formaciones, ocasionando la incertidumbre lógica de no saber si van a sufrir un nuevo incendio.
Es alarmante la situación que se vive en Chascomús. La seguridad y el mantenimiento de los trenes no pueden ser ignorados. La vida y el patrimonio de las personas están en juego. Es imperativo que se tomen medidas para evitar que estas situaciones se sigan repitiendo.