Los sindicatos de pilotos y de aeronavegantes realizarán asambleas el próximo jueves para definir si realizan nuevas medidas de fuerza luego de las medidas de fuerza de la semana pasada y de que el gobierno declarara a la aviación comercial como servicio esencial, lo que en principio podría limitar el alcance de las protestas.
Tanto la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) como la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA) tienen en carpeta una profundización del plan de lucha que llevan adelante en reclamo de mejoras salariales, tras una pérdida del poder real de sus sueldos que estiman en un 80%.
La tensión entre los gremios y el gobierno se acrecentó luego de que el ministro de Desregulación del Estado, Federico Sturzenegger, asegurara que la oferta de incremento salarial que pueden financiar “es cero”. La declaración de esencialidad que impulsó obliga, además, a mantener el 50% de los vuelos aún cuando se realicen paros.
En ese contexto, diputados aliados de PRO en el gobierno presentaron un proyecto para privatizar Aerolíneas Argentinas, compañía que había quedado excluidas de las que podían ser vendidas por el Estado en el decreto 70. La diputada Silvia Lospenatto dijo ayer que son varias las bancadas que están dispuestas a avanzar con la iniciativa-
Entre las medidas de protesta que se analizan figura la realización de un paro este mismo fin de semana. También está bajo estudio paralizar las tareas en los centros de capacitación de los pilotos y auxiliares de a bordo, lo que redundará en la afectación del servicio en cierto plazo porque no habrá personal que tenga la revalidación de sus permisos para trabajar.
Tanto APLA como AAA anticiparon que no acatarán lo contemplado en el decreto de esencialidad y que irán a la Justicia para impugnar esa norma porque “atenta contra el derecho constitucional de huelga y va en contra de lo establecido en la materia por la Organización Internacional del Trabajo (OIT)”. (DIB)