Por Ximena B. Xiong
La comunidad educativa de la Escuela de Educación Secundaria (EES) Nº 8, sede, ubicada en calle Avellaneda, se reunieron en Plaza Independencia para posteriormente dirigirse al Consejo Escolar y reclamar por mejoras de infraestructura y salubridad.
Más de 50 personas, entre estudiantes, padres, madres, docentes y personal auxiliar concentraron en Plaza Independencia con un objetivo claro de sentido de pertenencia hacia la institución educativa, que por su antigüedad presenta deterioros en algunos sectores.
Pasada las 10hs, la comunidad educativa se dirigió por calle Alvear hacia el edificio del Consejo Escolar donde reclamaron mejoras edilicias como ampliación de salones y comedor, baños, veredas, alambrado, arreglo de techos, pizarras, instalación de internet, entre otros.
Luego de haber sido recibidos en la entrada del edificio por la presidenta del Consejo Escolar, María Victoria Figueroa y el tesorero, Juan Manuel Almirón, los presentes hicieron saber los inconvenientes que viven a diario.
Tras idas y venidas, se reunieron padres, estudiantes y auxiliares con los consejeros para conversar sobre los temas y llegar a un acuerdo que quedó asentado en acta. Allí se comprometieron las autoridades del Consejo Escolar en solucionar, en la medida de lo posible, los desperfectos que presenta la escuela.
Al respecto, EL CRONISTA dialogó con Paola Umpierre, quien se desempeña como personal auxiliar de la E.E.S Nº 8 desde el 2017 y a lo largo de los años ha sido testigo de los deterioros en la institución educativa.
“Es un reclamo de los alumnos de la Secundaria 8 y padres, por cuestiones de infraestructura de lo cual venimos haciendo los reclamos hace varios años”, mencionó Umpierre a la vez que agregó: “Los chicos se sienten parte de la institución y nos consultaron a las auxiliares si estábamos de acuerdo en acompañarlos y les dijimos que sí”.
En la reunión, “se hablaron de los temas que afecta a la escuela, que no son pocos. Nos mencionaron que hay un proyecto y que, en la medida de lo posible, nos iban a solucionar los inconvenientes, entre ellos los baños, y se habló de cambiar el tanque de agua porque la condición no es óptima”.
En ese sentido, ayer desde el Consejo Escolar suministraron bidones de agua mineral y papel para la institución educativa debido a que el tanque en cuestión, “no posee tapa y esta sobre el techo”, señaló Umpierre.
Otros de los inconvenientes en el establecimiento educativo que fue manifestado en al reunión y por la comunidad educativa, refiere a los baños al contarse solamente con cuatro para todo el personal y estudiantes.
“Ahora nos dieron de la casa-habitación el baño listo para el personal y ayer (lunes) se hicieron unos arreglos para que la dirección se pueda mover”, ante los trabajos que ha llevado a cabo el Consejo Escolar en las últimas semanas.
Por otro lado, “planteamos una galería para el paso de los chicos a la hora de ir al comedor los días de lluvia, también las veredas en las entradas y el tema puertas en los salones. Prometieron varias cosas que, llegado el momento, lo vamos a reconocer si se dan”, finalizó Umpierre tras la reunión que duró más de una hora.
Vale destacar que en el establecimiento educativo anteriormente funcionaba el nivel primario y secundario. Con el tiempo y tras la apertura de la Escuela Primaria Nº 9 en barrio Gallo Blanco, la institución se trasladó al nuevo edificio en donde funcionaba también secundaria. Y en 2017, nuevamente se habilitó el edificio, que en su momento estaba en desuso, para la Escuela Secundaria Nº 8, sede, ante el crecimiento de la matrícula.