Las resoluciones que esperan con ansias las empresas, reflejarán la quita de subsidios a la energía, además de la mejora en los ingresos de las transportistas y distribuidoras que reclamaron días atrás en audiencia pública.
Tal como informaron oficialmente, habrá un aumento en el precio de la producción de gas, el cual representa un 36% de las tarifas final. Hasta diciembre, los hogares pagaron un 17% del costo real del abastecimiento (70 centavos de dólar por millón de BTU sobre US$ 4,10) mientras que las empresas pidieron subas mayores al 500% en sus márgenes. Esta suba se hará de forma “escalonada” durante los próximos tres meses.
A eso habrá que sumarle el incremento que se les convalide a las transportistas y distribuidoras, los otros componentes de las boletas además de los impuestos.
Si bien la última palabra la tendrá la Secretaría de Energía, aplicar ese combo multiplicaría lo que llega en las boletas al menos por 6 veces; es decir, subas del 700%.
En el sector privado confían que el incremento empiece a regir desde este 15 de marzo, para no diferir hasta abril la recomposición de sus ingresos en medio de meses con inflación de dos dígitos.
Quiénes pueden acceder al subsidio de tarifas
El Gobierno quiere restringir fuertemente las condiciones para acceder a la subvención estatal y cruzará múltiples bases de datos de ingresos y patrimonios, con lo que dejará afuera a quienes hayan comprado dólares u otra moneda extranjera en los últimos 3 meses, a los que viajaron al exterior (países no limítrofes) en los últimos 5 años, quienes usan prepagas no vinculadas a su empleo en relación de dependencia y los que tienen un auto o moto con menos de 5 años de antigüedad, entre otros criterios de exclusión.
La idea del equipo de Javier Milei es establecer tarifas únicas que reflejen los costos de abastecimiento del sistema de energía eléctrica y gas natural por redes, y otorgar una transferencia directa o descuentos a los usuarios identificados como vulnerables.
Además, con la Resolución 7/2024 de la Secretaría de Energía vigente desde febrero, las pymes de la industria y el comercio, los centros de salud y educación, los edificios, el alumbrado público y los clubes de barrio ya no tienen subsidios, por lo que recibirán aumentos que en muchos casos superarán el 300% (se les cuadruplicarán las facturas). (DIB)