El itinerario incluyó una visita a la maderera Delgado y Román, comercio referente de la zona, y Casa Laurel, flamante hotel boutique que conserva parte de la historia de lo que fue durante más de 20 años la casa de Raúl Alfonsín.
“Lo veo permanentemente en mis encuentros con los comerciantes y emprendedores de nuestra región. Los lugares que hoy visitamos junto a Ramiro tienen la dedicación y el empeño necesarios, pero necesitan que el Estado les quite el pie de la cabeza para poder crecer y generar más puestos de trabajo”, sostuvo Rabinovich.
Por su parte, Ferrante destacó la necesidad de apuntalar y promover el emprendedurismo y la cultura del trabajo, y recordó que desde el deliberante “se está trabajando en una batería de medidas para acompañar el esfuerzo productivo de tantos vecinos y vecinas”.