Vos comprás tu entrada, ingresás al show y vas a recibir una pulsera LED de plástico. Dichas pulseras utilizan transmisores con un alcance de hasta 800 metros, ideal para estadios de todo el mundo.
La tecnología central de estas pulseras es una radiofrecuencia de baja frecuencia. Cada pulsera tiene luces LED que responden a un transmisor que está ubicada en el centro del show.
Estas pulseras se utilizaron en diversos shows y son conocidas como Xylobands. Las mismas fueron creadas por por Jason Regler, un fanático de la banda. Las mismas fueron estrenadas en el 2011 en un recital de Madrid.
Regler tuvo su primer encuentro con el grupo londinense gracias a una tormenta de nieve. El hombre tenía entradas para participar de un Meet and Greet con Coldplay en un recital en Newcastle, pero nunca pudo llegar por las adversas condiciones climáticas. Desolado, se puso en contacto con la organización.

Para su sorpresa, recibió un mail del representante de la banda, Phil Harvey, quien lo invitó a participar de un ensayo de Coldplay. Ahí encontró el momento para presentarles su idea: una pulsera LED.
La tecnología central detrás de este producto es la radio frecuencia (RF) de baja potencia. Cada pulsera tiene luces LED que están controladas por un solo transmisor de RF ubicado en el centro cuyas emisiones de señal se coordinan con la música y la iluminación del escenario.
El transmisor de RF transmite una señal de 60 kHz de ancho centrada en 869,5 MHz a una potencia de menos de 1 vatio, utilizando un esquema de modulación de modulación por cambio de frecuencia (FSK).
Vale mencionar que un trabajador de la organización, al final de cada show, es el encargado de recolectar las pulseras que se le da a cada uno de los espectadores; sin embargo, su manera sorprendió a más de uno y se viralizó en las redes sociales.
El hombre, de pechera verde, se colocó en la salida principal del Monumental con un megáfono y cantó: La pulsera en el cajón, la pulsera en el cajón, la pulsera en cajón, al ritmo de “Clocks” de Coldplay.

El canto y su simpatía generó la adhesión de los espectadores que salían y comenzaron a aplaudirlo mientras cantaba. El pequeño fragmento se viralizó en TikTok y Twitter este sábado. “El único trabajador argentino que hace su trabajo feliz es el que pide las pulseras después del recital de Coldplay”, escribió un usuario de Twitter.