Jorge Ortale: “No hay ningún fundamento médico para no vacunarse”
El pediatra chascomunense advirtió sobre los riesgos de la desinformación, destacó la eficacia y seguridad de las vacunas y remarcó que la inmunización es una responsabilidad individual y colectiva que protege a toda la comunidad.
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El reconocido pediatra chascomunense Jorge Ortale remarcó la importancia de la vacunación como una herramienta clave de la salud pública y advirtió sobre los riesgos que genera la desinformación y el crecimiento de los discursos antivacunas, que ponen en peligro no solo a quienes deciden no inmunizarse, sino a toda la comunidad.
“Vacunarse no es solo una decisión personal: es un acto de responsabilidad social”, sostuvo el médico (Matrícula Provincial N° 12.480), al explicar que la inmunización protege especialmente a los sectores más vulnerables, como niños, personas mayores y pacientes con enfermedades crónicas o sistemas inmunológicos debilitados.
Ortale recordó que las vacunas han sido, a lo largo de la historia, una de las herramientas más importantes de la medicina preventiva, permitiendo controlar e incluso erradicar enfermedades que durante décadas causaron graves complicaciones y miles de muertes, como la viruela, la poliomielitis o el sarampión.
“Una vacuna es un producto médico elaborado a partir de gérmenes, ya sean bacterias o virus. Aplicados a una persona, provocan la formación de anticuerpos o defensas que pueden durar muchos años o incluso toda la vida”, explicó el pediatra.
En términos simples, Ortale señaló que la vacunación funciona como un entrenamiento del sistema inmunológico, preparando al organismo para responder de manera rápida y eficaz cuando entra en contacto con el virus o la bacteria real.
“Cuando ese agente infeccioso llega al cuerpo, los anticuerpos formados por efecto de la vacuna lo atacan y lo neutralizan, impidiendo que se produzca la enfermedad o haciendo que su curso sea mucho más leve”, indicó.
El médico fue enfático al desmentir mitos y temores infundados: “No hay ningún fundamento médico para no vacunarse, ninguno. Las ventajas son enormes y es muy importante que la gente se vacune”, afirmó.
En ese sentido, explicó que la gran mayoría de los efectos secundarios asociados a las vacunas son leves y transitorios, como dolor en el lugar de aplicación o un poco de fiebre, y remarcó que ante cualquier duda o síntoma las personas pueden acercarse a los Centros de Atención Primaria de la Salud (CAPS) para recibir seguimiento y asesoramiento.
Ortale también destacó la calidad del sistema local de inmunización: “El servicio de vacunación del Hospital Municipal es excelente. Las vacunas que se utilizan son muy buenas, no hay ninguna excusa para no vacunarse”, subrayó.
Frente al avance de discursos antivacunas, el pediatra advirtió que la baja en las coberturas puede provocar la reaparición de enfermedades ya controladas, con consecuencias graves y evitables. “La desinformación genera miedo y ese miedo pone en riesgo a toda la comunidad”, señaló.
Finalmente, Ortale insistió en que vacunarse es un acto de cuidado colectivo: “No se trata solo de protegernos a nosotros mismos, sino de cuidar a nuestros hijos, a nuestros adultos mayores y a quienes no pueden vacunarse. Ese es el verdadero sentido de la inmunización: protegernos entre todos”.
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