En el día de ayer, el INTA Chascomús abrió sus puertas para recibir la visita anual de alumnos y docentes de la Universidad Argentina de la Empresa (UADE). El objetivo de la jornada fue permitir a los futuros profesionales conocer en profundidad los diversos trabajos llevados a cabo en la Chacra Experimental Manantiales, un verdadero laboratorio a cielo abierto para la innovación agropecuaria.
Durante el recorrido, los visitantes exploraron el módulo mixto en transición agroecológica y los módulos ganaderos, donde pudieron observar de cerca las prácticas de manejo sostenible y productivo. Por la tarde, la visita se extendió al tambo, brindando a los estudiantes la oportunidad de participar en una práctica de ordeñe, lo que les permitió una aproximación directa a la realidad de la producción lechera.
El INTA: pilar del desarrollo agrario y económico
El Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) cumple una función vital en el desarrollo sostenible del sector rural y agroalimentario de Argentina. Su misión se centra en investigar, desarrollar e implementar tecnologías agropecuarias de vanguardia, así como en brindar servicios de extensión y capacitación. La visita de los alumnos de la UADE a la Chacra Experimental Manantiales es un claro ejemplo de cómo el INTA contribuye a la transferencia de conocimiento y a la innovación, elementos cruciales para el avance económico del país.
Desde 1985, la Chacra Experimental Manantiales mantiene un planteo de cría demostrativo con manejo controlado y un riguroso plan sanitario. Allí se analizan en detalle los resultados físicos (carga, producción de carne por hectárea, eficiencia de stock) y reproductivos (índices de preñez, parto, vivos a 7 días, destete). A pesar de los cambios en su superficie a lo largo de los años, el módulo mantiene una carga animal de 1 Equivalente Vaca (EV) por hectárea, empleando recursos accesibles para pequeños y medianos productores de la región.
Innovación en sistemas productivos
La búsqueda de eficiencia en el uso de recursos (suelo, agua, insumos) impulsa al INTA a desarrollar sistemas intensivos. Un Rodeo de Cría en Sistema Intensivo busca mantener una carga de 2 EV por hectárea, lo que triplica la media zonal, logrando excelentes resultados reproductivos. Esto permite liberar superficie para otras actividades rentables como la agricultura o el engorde, posibilitando el “ciclo completo” en el mismo establecimiento sin la necesidad de desprenderse del capital de las vacas.
En el área de Producción de carne en invernada, desde 2003 se demuestra la viabilidad de la recría y engorde de destetes propios o de compra, llevando a los animales a peso de faena para consumo. Este sistema, basado en una cadena forrajera de pasturas y promociones de rye-grass y lotus con suplementación estratégica, ha logrado producciones promedio de 570 kg de carne por hectárea por año.
Finalmente, la Unidad demostrativa de Producción lechera busca medir la rentabilidad en la zona con un rodeo lechero de base pastoril, complementado con silajes y suplementación de granos y concentrados. Este módulo, de 210 hectáreas, produce diariamente 5000 litros de leche y se ha consolidado como el tambo institucional de INTA para el área del CERBAS.
La Agencia de Extensión Rural (AER) Chascomús representa a la EEA Cuenca del Salado en seis partidos (Chascomús, Lezama, Pila, General Belgrano, Magdalena y Punta Indio), extendiendo el alcance y el impacto de la investigación del INTA a una vasta región. La visita de la UADE resalta la importancia de esta institución en la formación de futuros profesionales y en la generación de conocimientos que impulsan el desarrollo agrario y económico de Argentina.