En estos seis meses y medio, Lanata tuvo varios ingresos a la clínica de rehabilitación Santa Catalina. No obstante, el 18 de septiembre debió ser trasladado nuevamente al Italiano por un cuadro de neumonía y se decidió internarlo en terapia intensiva. Su estado, ya delicado, se había agravado el último viernes, repasa el sitio Infobae.
Según el último parte médico oficial, que se dio a conocer el viernes 6, Lanata en ese momento se encontraba “vigil, afebril y en ventilación mecánica durante la noche”. El parte agregaba, además, que estaba hemodinámicamente estable y no requería drogas vasoactivas. Después de que ese documento vio la luz, no se volvió a emitir un parte desde el centro médico, pero fue principalmente su hija mayor, Bárbara, quien se ocupó de dar a conocer las novedades a la prensa.
Fundador de los diarios Página/12 y Crítica de la Argentina y de varias revistas, también fue el creador de exitosos programas de televisión que marcaron época, como Día D, Periodismo Para Todos y Lanata Sin Filtro. Líder en la radio durante más de una década, realizó documentales, escribió diversos libros de ficción y no ficción, y hasta fue primera figura de una revista en el Maipo. Todos sus proyectos tuvieron el signo de la desmesura. Destapó los casos más resonantes de corrupción de los noventa y de la era kirchnerista: fue el periodista más influyente de la Argentina en las últimas décadas. Provocó fervores y odios de una intensidad poco usual.